En los últimos meses, son los turistas quienes, a través de TikTok, Instagram y otras redes sociales, han exhibido la violencia y abusos en el cobro de tarifas de parte de taxistas convencionales, además de la práctica ahora común de agresiones a supuestos operadores de este tipo de servicios de contratación por plataformas, en los que los propios turistas también han estado involucrados.
Ciudad de México, 21 de septiembre (SinEmbargo).– El conflicto es amplio y hondo. Ha estallado en diversos aeropuertos del país, pero su ejemplo más claro es el de la joya turística mexicana en el Caribe: taxistas y conductores de aplicaciones como Uber y DiDi mantienen una disputa que se ha tensado, se ha relajado y luego se ha tensado de nuevo por el acceso al Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC).
Mientras unos, los taxis, piden “piso parejo” y competencia leal; los otros, los conductores de transporte por app, aseguran que su presencia es la que permite esa competencia y rompe con el monopolio. Las agresiones, que se han intensificado por momentos en los últimos años, parecen alcanzar su límite en estos meses.
Lo cierto es que se trata de una larga historia.
El 11 de enero de 2023, el Tercer Tribunal Colegiado del Vigésimo Séptimo Circuito en Cancún, avaló a Uber como una plataforma de transporte privado, por lo que puede operar sin una concesión en Quintana Roo. Y es que pese a los recursos presentados por los sindicatos de taxistas, los magistrados dijeron estar apegados a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por lo que dictar lo contrario sería inconstitucional.
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Fuente: Sin Embargo