El periplo emprendido desde hace 15 días por la aún presidenta municipal de Solidaridad, Laura Beristaín a nivel nacional, tiene como finalidad librar procesos penales y ser la primera crucificada oficial, del lastre que padece en la actualidad la cuarta transformación encabezada por Andrés Manuel López Obrador.
Hasta el momento, existen más de diez alcaldes emanados de Morena a nivel nacional que sufren acusaciones y señalamientos de corrupción. Sin embargo, ninguno ha enfrentado procesos reales y las acusaciones son mediáticas con mucho soporte periodístico.
Empero, en el caso de Laura Beristaín, la historia podría cambiar drásticamente. Más allá de pelear realmente la elección de Solidaridad, la alcaldesa playense está de gira para encontrar “cobijo” y “blindaje” oficial.
Lo mismo le ha pedido a Mario Delgado, Citlali Hernández que a Ricardo Monreal, la acerquen a Andrés Manuel López Obrador para no ser crucificada, ya que de no encontrar ese apoyo podría significar un alto negativo para el discurso oficialista que empodera las máximas de: No mentir, no robar, al pueblo.
Hasta ahora, Laura Beristaín se ha acercado al apoyo, pero aún no lo tiene. Por eso es que llegó desde el Congreso del estado, la apertura para promover –de nueva cuenta– un juicio político en su contra. De igual manera el discurso de Lily Campos, alcaldesa electa, sigue siendo el mismo: auditoría a fondo y llegar a las últimas consecuencias.
Ante esto la pregunta que pesa dentro del municipio de solidaridad es, ¿Cómo llegó Laura este punto que parece no tener retorno?
La respuesta es simple. Alrededor de la alcaldesa hubo errores, mentiras y traiciones, que hasta el momento han pasado a segundo plano, por una pantalla legal de defender un voto perdido, al igual que del hecho de buscar cubrir corrupción desde el Ayuntamiento de Solidaridad.
Qué sabemos:
Uno de los principales errores que le han criticado a Laura Beristaín Navarrete, fue el hecho de no pedir licencia y separarse del Ayuntamiento, para hacer campaña de manera directa y no por lapsos y horarios restringidos.
El equipo de Laura Beristaín le creyó a una agencia de imagen política digital de la Ciudad de México que se jacta de “crear historias políticas favorables” para todos sus candidatos. Y por este servicio se pagó 450 mil pesos del erario público.
La agencia le hizo creer a Laura Beristaín que sus negativos se irían al olvido y que con el factor Morena ganaría la elección. Al final, como siempre sucede, los “asesores externos” nunca conocen la realidad municipal que marca una elección.
En tanto, las mentiras llegaron desde la familia Beristaín. Juan, hermano de Laura, prometió convencer a la estructura de Cristina Torres con base a cañonazos de dinero. Incluso, el hermano incómodo (como se le conoce) pidió más de 20 millones de pesos para hacer operación “unión”, la cual constaba en tomar esa estructura que, principalmente, domina Villas del Sol.
Al final el dinero sí llegó, pero el resultado no. El recurso se entregó, pero no fue repartido. Una mentira que causó estragos el día de la elección para un aparato que a las 12 del día del 6 de junio se jactaba de tener controlada la situación y le mandaba mensajes a Laura Beristaín llenos de triunfalismo.
Y la traición llegó de la mano que es experta en estas cuestiones. Emiliano Ramos llegó a coordinar una campaña para el oficialismo y no para Laura Beristaín. Fiel al estilo Ramos, Emiliano vendió estructura, nombres, datos claves a un muy buen precio.
Los asesores de Laura Beristaín nunca se cuestionaron porqué Emiliano Ramos ha vivido cómodamente en los últimos daños durante el actual gobierno estatal, sin recordar que fue uno de los artífices de la alianza PAN-PRD que llevó al triunfo a Carlos Joaquín González a la gubernatura en el 2016.
Emiliano Ramos estableció el esquema de traición con José Luis Rodríguez “El Puma”, otrora operador de Juan Ignacio García Zalvidea y uno de los oponentes de Morena tanto en Cancún como en Playa del Carmen.
Ambos personajes tejieron fino para evitar ser descubiertos, sin embargo su traición dejó rastro y han sido detectados. Al final de cuentas fue Emiliano Ramos siendo Emiliano Ramos, mientras Laura Beristaín entró en debacle por errores, mentiras y traiciones.
Bemoles
Posibilidad… Es la que se le ha abierto a Atenea Gómez Ricalde de ser propuesta para encabezar la candidatura a la gubernatura del estado por la coalición PAN, PRD y PRI, ante la falta de candidatos presentables de cara al 2022.
Pillaje… Es el que presuntamente habría cometido la senadora con licencia por Quintana Roo Mayuli Simón, con los recursos de la alianza PAN, PRD y PRI durante el pasado proceso electoral. A la panista se le señala de llevarse el dinero y no repartirlo entre los candidatos como debía de ser.